Hola, encantado de saludarte. Mi nombre es Óscar Gaspar Fernández, tengo 23 años y soy Entrenador de Porteros. Afortunadamente he tenido la posibilidad de vivir experiencias al más alto nivel en mi todavía breve carrera deportiva.
He formado parte del Staff del CD Tacón en Primera Iberdrola (Temp. 19-20), anteriormente en el Rayo Vallecano de Madrid – Primera Iberdrola (Temp 18-19) y previamente en su filial en 2ªDivisión Femenina (17-18). Mis inicios fueron en fútbol base masculino y senior en la Regional Preferente madrileña en CD San Roque EFF.
De manera adicional, he participado como ponente en diferentes universidades, máster y congresos relacionados con el entrenamiento específico del portero. Además de investigar e intentar generar información nueva sobre aspectos relacionados con el rendimiento de los guardametas.
En este artículo trataré de explicarte, de una manera muy sencilla, cómo entiendo el análisis del portero de fútbol desde una perspectiva global.
¿Cuál es el origen de la necesidad de analizar al portero de fútbol?
Para conocer el origen de la necesidad del análisis del portero, primero hay que reconocer el carácter multifactorial, variable y cambiante del desarrollo del propio juego.
Debido a estas características del fútbol, los mecanismos, interacciones y relaciones entre los diferentes componentes del juego, han ido evolucionando a lo largo del tiempo.
El estado de complejidad de sistemas en el que nos encontramos actualmente, será sin duda el punto de partida de futuras adaptaciones.
Es intuitivo pensar que, la posición específica del portero, ha ido desarrollándose de manera simultánea al progreso que ha seguido el juego.
Consecuentemente, las demandas de rendimiento del portero se han ido modificando, siguiendo un proceso de evolución creciente con respecto a las responsabilidades específicas del puesto.
En la actualidad, las necesidades del propio juego han supuesto un aumento de la tasa de participación del guardameta.
Esto se debe, a la nueva ocupación de espacios que previamente no se veían solicitados a invadir, quedando por entonces relegados, a defender la propia portería.
Este aumento en el porcentaje de intervención, supone mayores interacciones técnico-tácticas a nivel ofensivo y defensivo. Esto ha potenciado la especificidad del puesto y se ha convertido en objetivo de análisis para potenciar el rendimiento individual y colectivo.
¿Qué analizamos?
Primero, debemos tener en cuenta que analizamos el comportamiento de personas: sus creencias, emociones, sentimientos característicos y diferenciadores. Los cuales, influyen directamente en sus conductas e intervenciones en el terreno de juego.
Entiendo el análisis del portero como un proceso de observación-evaluación, dividido en 3 estaciones que se reproducen de manera cíclica durante el desarrollo del juego.
Preparación
Focalizamos en el comportamiento táctico y su predisposición corporal precedente a la fase de ejecución.
Ejecución
Valoración a nivel cualitativo de la ejecución técnico-táctica.
Repercusión
Observación de la consecuencia emocional del portero tras la ejecución, prestando especial atención al lenguaje corporal posterior. Indicador, relacionado con la fase de preparación de la siguiente intervención.
Debemos hacer una distinción en función de si vamos a realizar un análisis del portero propio o si analizamos al portero rival.
El primer caso, se trata de un proceso muy específico, orientado y dirigido a la mejora individual del guardameta en relación a las demandas del propio modelo de juego.
En el segundo caso, debemos analizar las tendencias conductuales frecuentes utilizando la técnica DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades).
A nivel defensivo
Es interesante observar la orientación y predisposición del portero a invadir zonas en juego aéreo y en balones a la espalda de la última línea. Además, de manera adicional podremos anotar algún aspecto característico especial del portero.
A nivel ofensivo
Es de utilidad darle importancia a la manera de:
- Resolver las situaciones de reinicio.
- La capacidad para superar líneas de presión.
- Sobretodo, focalizar la atención en qué perfil tiene más dificultades para controlar y darle continuidad a su juego de ataque.
Una vez tengamos una información estructurada del perfil del portero rival, se elabora un informe descriptivo para preparar la estrategia operativa del microciclo semanal.
Estructuración cronológica del análisis del portero en el microciclo competitivo
A continuación se expone la estructuración cronológica del análisis del juego, aplicado al portero durante el microciclo semanal:
El análisis del portero tiene 3 partes. Comienza tras finalizar el partido del fin de semana, continúa en los entrenamientos y termina con el análisis en directo del siguiente partido de la jornada.
Análisis del partido
Tras la finalización del encuentro, se lleva a cabo la visualización del partido. Se elaboran los cortes en bruto de sus intervenciones y la selección específica de los fragmentos de vídeo más representativos. Estos fragmentos, deben contener los aspectos a mejorar y reforzar en relación al modelo de juego.
Para mí, lo ideal, es aplicar la sesión de vídeo de partido propio, el día después de haberse disputado el encuentro (MD+1). El objetivo principal es que el portero pueda afrontar las decisiones tomadas con cierta distancia, pero con el recuerdo del partido reciente. Esto le permitirá, aproximarse lo máximo posible a la situación del partido.
Además, nos da la posibilidad de cerrar la semana independientemente del resultado y focalizar la atención en el siguiente microciclo.
Sesiones de entrenamiento
El día de vuelta al entrenamiento (OFF+1), es útil presentar los comportamientos ofensivos y defensivos del rival mediante un vídeo de una duración de 3-4 minutos.
Con el fin de poder contrarrestar sus argumentos en fase ofensiva/transición DF-AT, es interesante que contenga los siguientes ítems generales:
- Automatismos ofensivos rivales.
- Definiciones características de los delanteros.
- Jugadas características diferenciadoras de ABP.
En relación a sus comportamientos en fase defensiva/transición AT-DF, es interesante señalar los siguientes aspectos:
- Distribución, altura y comportamiento del bloque durante los reinicios.
- Comportamiento y actitud de los jugadores en presión con balón en juego.
- Tendencia a saltar a robar al portero.
Este contenido audiovisual es útil para iniciar el proceso de descubrimiento guiado que irá desarrollándose durante el microciclo competitivo a través de, la relación entre lo visualizado en el vídeo y las tareas de entrenamiento.
Este hecho es importante, puesto que el análisis semanal del rendimiento del portero se va a relacionar con lo trabajado en las sesiones en base al rival.
El análisis de las sesiones de entrenamiento nos ofrece la posibilidad de tener una retroalimentación saludable con el guardameta, alejada de la penalización que ofrece la competición.
Esta situación es fundamental, porque nos permite desarrollar un aprendizaje focalizado en el refuerzo. Así generamos un contexto de confianza y mejora, donde se busca maximizar las repercusiones positivas que potencian el rendimiento y minimizar el castigo.
Análisis en directo
Finalizamos la estructura del microciclo competitivo con el análisis en directo durante el partido del fin de semana. El reconocimiento del contexto y la capacidad de adaptarse a él por parte del portero, debe ser el eje principal del análisis.
En torno a esto, debemos valorar el rendimiento del guardameta. Identificando las situaciones de corrección inmediata y las situaciones de refuerzo. Estas serán transmitidas al Staff durante el juego y al portero en el descanso del encuentro.
¿Cuál es la mejor vía de transmisión de las ideas?
La vía ideal es aquella que mejor capacidad de adaptación tenga a las necesidades del Staff y de los guardametas.
El Staff
En relación a la información del portero rival, me parece de utilidad generar un informe que resuma los aspectos más representativos que deba conocer el Staff.
Así se ofrece la posibilidad de modificar la estrategia en ABP o potenciar ciertos aspectos del modelo de juego, que permitan aprovechar o neutralizar las fortalezas y debilidades del guardameta rival.
De cara a la presentación a los jugadores (generalmente jugadores de perfil ofensivo), debemos tener en cuenta que la información que facilitemos debe ser: breve, clara, concisa y que sugiera posibles soluciones a la situación que plantea el portero rival.
El portero
Es fundamental generar un clima de confianza-aprendizaje que, sin duda, es un catalizador de los procesos de mejora y rendimiento.
En cuanto a la metodología de transmisión, es interesante generar un contenido audiovisual con apuntes de refuerzo/mejora. Posteriormente, se le envía de manera telemática (a través del móvil) para que pueda visualizar el vídeo de manera independiente, sin la presencia condicionante del técnico.
De este modo, iniciamos un proceso reflexivo de autoevaluación y la obtención de conclusiones propias. Esto fomenta el espíritu crítico lo cual, es un factor fundamental para la mejora del portero.
Posteriormente, este vídeo se comentará en una reunión individual, generalmente con el entrenador de porteros.
En esta reunión tenemos que tener en mente el “Principio de la dinámica del aprendizaje” compuesto por 4 estados:
- Incompetencia inconsciente.
- Incompetencia consciente.
- Competencia consciente.
- Competencia inconsciente.
Es importante identificar en que fase se encuentra el portero, ya que en función del estado, el abordaje a nivel comunicativo y de entrenamiento será diferente.
La planificación de los contenidos de mejora debe ir dirigida a cumplir unos objetivos personales reales-alcanzables, descubiertos en las sesiones de vídeo. Así evitamos planificaciones orientadas a la consecución precoz del éxito deportivo. De esta manera evitaremos sentimientos de fracaso-frustración personal, que son factores limitadores de las capacidades de aprendizaje y mejora.
Recordemos, que el análisis es un proceso de descubrimiento guiado, donde tenemos la posibilidad de ayudarnos de un soporte audiovisual y del entrenamiento como medios para el aprendizaje.
Si llevamos a cabo un proceso de observación, intervención y evaluación adecuado a los guardametas, se traducirá en una optimización del rendimiento individual y colectivo.
Evaluación subjetiva de la evaluación objetiva
Actualmente los técnicos tenemos la posibilidad de disponer de una infinidad de datos a nuestra disposición. Todo gracias a: la evolución de la tecnología, desarrollo de diferentes software de análisis, bases de datos y demás soportes.
Esto es un gran avance en el desempeño actual del fútbol, siempre que se le dé un uso con sentido, acorde a las necesidades del Staff y del modelo de juego propuesto.
Debido a esto, es interesante la selección y combinación de variables que se consideren útiles para la potenciación del rendimiento del portero en relación a las necesidades del equipo.
Consecuentemente, es intuitivo pensar que la verdadera importancia reside en la correcta selección y adecuación de los parámetros a las demandas del modelo de juego.
Tras haber realizado este proceso, toma importancia la metodología de evaluación de los registros objetivos. Aquí debemos realizar una lectura subjetiva y contextualizada a las necesidades del equipo.
Pongamos, como ejemplo práctico, que el modelo de juego de un equipo es combinativo, con una intencionalidad de superar líneas de presión y tener posesiones en campo contrario para generar ocasiones de gol. En este caso, tiene sentido que le demos importancia a ciertos parámetros como los que se exponen a continuación.
Fase Ofensiva:
- Porcentaje de efectividad de pases.
- Número de pases largos/pases del guardameta.
- Efectividad de pases largos/pérdidas del guardameta.
- Pérdidas en relación al nº de pases.
- Pérdidas en campo propio/pérdidas totales del guardameta.
Fase Defensiva:
- Nº de balones a la espalda.
- % de acierto en balones a la espalda.
- Nº de tiros recibidos.
- % de tiros detenidos.
La obtención de estos datos nos permiten elaborar, por ejemplo, gráficos de radar que son: visuales, muy intuitivos de interpretar y muy útiles para optimizar la interpretación de los datos.
La obtención de estos datos después del partido y la elaboración de gráficos, nos debe permitir realizar una interpretación subjetiva de las variables obtenidas. Siempre tratando de identificar correlaciones entre los diferentes parámetros.
¿Qué beneficios tiene hacerlo?
Tener información específica y precisa sobre el rendimiento de nuestro portero nos permite:
- Valorar las sinergias y relaciones con las líneas más cercanas en el juego.
- Conocer las fortalezas que debemos reforzar y potenciar.
- Identificar las debilidades que se deben reeducar y mejorar.
Esto facilita la labor del entrenador de porteros, extrayendo los objetivos citados anteriormente, cuya consecución será la finalidad de las tareas de entrenamiento que proponga durante la semana.
En relación a conocer las virtudes y limitaciones del portero rival, nos permite generar adaptaciones y recursos para el aprovechamiento o neutralización de estos contenidos. Siempre con la finalidad de obtener una ventaja colectiva y obtener resultados positivos en el partido.
En definitiva, conocer en detalle las tendencias de intervención del portero de fútbol nos ofrece la posibilidad de generar una información de utilidad para el Staff y los jugadores, convirtiéndose en un potenciador del rendimiento colectivo.
Buen artículo. Gracias.
Te faltó añadir la fecha de publicación.